La Organización Mundial del Comercio emitió su informe anual correspondiente a 2023 donde vuelve a advertir sobre los riesgos de poner en tela de juicio los beneficios de la globalización.
Las tensiones geopolíticas, la disrupción en el mundo del trabajo que provocó el ascenso de China, las tensiones comerciales derivadas y el cisne negro de la pandemia, con sus derivaciones en la logística internacional formaron un cúmulo de dudas en torno a la vigencia de la globalización y del comercio internacional como vectores del desarrollo, la inclusión y de economías sostenibles, sobre todo, a partir del auge del cambio climático.
José Antonio Monteiro, Economista Investigador de la División de Estudios Económicos y Estadística de la OMC, explicó desde Ginebra que “las percepciones sobre los beneficios del comercio internacional y de la cooperación multilateral han ido cambiando en los últimos años y surgió la sensación de que la globalización puede exponer a las economías a riesgos excesivos”.
Política en el comercio
“Surgieron entonces políticas comerciales centradas en preocupaciones geopolíticas, por ejemplo, propuestas y estrategias para relocalizar las cadenas de suministro en países más cercanos o el fomento de cadenas de suministro entre países aliados”, señaló, tras agregar que “a diferencia del desacoplamiento económico, la re-globalización se centra en la cooperación internacional y reconoce que los problemas globales requieren soluciones igualmente globales”.
Pero “el arreglo de la globalización no es simplemente más globalización”, dijo, al destacar que es necesaria una reforma del sistema comercial multilateral para garantizar que se respeten los principios de un comercio más resiliente, inclusivo y sostenible”.
“Aunque algunos países pueden beneficiarse de la desviación del comercio, los países en desarrollo y en particular los países menos avanzados son los que más sufren de la fragmentación comercial, y los estudios indican que esta fragmentación puede aumentar la desigualdad y la pobreza dentro de la economía ya que restringe las oportunidades económicas y los recursos financieros en este contexto”, señaló Monteiro.
Cambio climático
Una de las nuevas narrativas que pone en crisis al sistema multilateral del comercio es el cambio climático. Los bienes, en el mundo, se mueven mayormente por agua, y la industria marítima, por el volumen que opera, es la principal responsable de la emisión de gases de efecto invernadero. La huella de carbono se transformó, entonces, en una gran barrera para-arancelaria. Sin embargo, Monteiro nos comentó cómo enfoca el tema la OMC.
“La crisis climática plantea dudas sobre si el comercio internacional puede coexistir con los esfuerzos de descarbonización de la economía. La relación entre el comercio y la sostenibilidad ambiental es compleja: por un lado, el comercio aumenta las emisiones de gases de efecto invernadero al generar más producción más transporte y más consumo; sin embargo, por otro lado el comercio internacional también permite reducir las emisiones al promover la adopción de tecnologías ambientales”, explicó el especialista.
Barreras
Estas tecnologías, no obstante, se ven afectadas por barreras comerciales relativamente altas “lo que limita el papel positivo que el comercio internacional pueda jugar en la lucha contra el cambio climático”, agregó, y advirtió que ” la falta de coordinación y las políticas climáticas también puede resultar en políticas más costosas y menos efectivas, en particular, las políticas climáticas unilaterales que impactan negativamente a los socios comerciales pueden dar lugar a conflictos comerciales poniendo en peligro la eficacia de las políticas ambientales”.
Por último, le consultamos al experto de la OMC cuáles son los beneficios del comercio que están más vigentes que nunca.
“Es una pregunta fundamental en estos tiempos. Históricamente, se asoció al comercio con la promoción de la paz y la reducción de la pobreza, pero su potencial está en que contribuye a que nuestras economías sean más resilientes, inclusivas y sostenibles. POr eso hablamos de re-globalización, porque la globalización es la respuesta más efectiva a los retos mundiales ante las estrategias de fragmentación del comercio”.
“El futuro del comercio internacional será digital, inclusivo y verde” concluyó Monteiro.
Por TradeNews